Chimalhuacán, Méx. 29 de agosto 2016.- La comunidad parroquial de la Divina Providencia y Santa María de Guadalupe recibió, con visibles muestras de alegría, a su nuevo párroco que también asumirá el cargo de Vicario Episcopal de Nuestra Señora de Guadalupe, el Pbro. Manuel Arturo Guerra Vázquez.

La Eucaristía fue presidida por Mons. Juan Manuel Mancilla Sánchez, Obispo de Texcoco, y concelebraron, entre otros sacerdotes de la Diócesis de Texcoco, el P. Sergio Garduño, vicario general; P. Erasto Pacheco Ramos, vicario de pastoral; P. Crisóforo Domínguez, vicario episcopal de san Antonio; P. Virgilio Altamirano, vicario episcopal de Santo Domingo; P. Efrén Velázquez, vicario episcopal de san Vicente; P. Francisco Oliva, secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal para la Pastoral Profética; y P. Salustio Santamaría, rector del Seminario Mayor de Texcoco.

En su homilía, el obispo señaló: “El Bautista supo festejar a Cristo, y por eso, a lo largo de su vida recibió gracias incontables de parte de Dios, entre muchísimas, hoy sólo quiero compartir con ustedes esta: De dar siempre su lugar a Cristo, poner a Jesucristo en el centro de su corazón, de su Ministerio, de su vida. San Juan Bautista es el que nos regala esa perla preciosa que toda la Iglesia bendice, agradece, proclama día con día…” 

Mons. Juan Manuel indicó que: “Él es el Cordero de Dios” y, con eso mis queridos hermanos, él estaba diciendo que Jesucristo es inocente; Jesucristo es nuestro gozo, nuestra fiesta, nuestro abrazo. Pidámosle a Dios esta tarde mis queridos hermanos que como El Bautista, a toda hora, en todas partes, sepamos dirigir en reverencia, en cariño, en homenaje, a Jesucristo nuestro Divino Señor.”

Como lo marca el rito propio de la toma de posesión parroquial, le fueron entregadas las llaves de su nueva parroquia, y con ellas, su nueva encomienda como Vicario Episcopal para las 15 comunidades parroquiales que conforman la Vicaría, ahora a su cargo.

El padre Manuelito agradeció, primeramente a Dios y a Mons. Juan Manuel, sin pasar por alto a las comunidades que le acompañaban: Divino Salvador Atenco, Santo Domingo de Guzmán Chimalhuacán, Nuestra Señora de la Soledad, San Miguel Arcángel Tlaixpan, su anterior parroquia, y a las comunidades religiosas, agentes de pastoral y fieles que desempeñan su apostolado en la vicaría de Nuestra Señora de Guadalupe y a quienes colaboran directamente en la comunidad parroquial de la Divina Providencia.

Oremos por la vida sacerdotal del P. Manuel en su nueva misión.