• La globalización de la cultura y la educación, aunado a los avances científicos, tecnológicos e informáticos, llevaron a los Obispos de América Latina a reflexionar hondamente sobre este fenómeno, que continúa su proceso histórico.

 

  • Precisamente, ante estas reflexiones, en el umbral del Tercer Milenio, san Juan Pablo II, lanzó una propuesta mundial: “La globalización de la solidaridad”, ante posiciones cada vez más radicales de individualismo, materialismo, consumismo, entre otras tendencias sociales.

 

  • El Papa Francisco se ha referido a ella en el numeral 52 de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium.

 

La Pontificia Comisión para América Latina, publicó en su sitio web (www.americalatina.va) una interesante conferencia del doctor en filosofía, Rodrigo Guerra López, fechada el 21 de febrero del año en curso, titulada “Cristianismo y Cambio de Época”.

En un desafiante desarrollo histórico, el Dr. Guerra López asevera que la Iglesia en México, desde los albores del año 2000, se ocuparon de la reflexión en cuestión, así mismo la Iglesia Latinoamericana a partir de las investigaciones del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), y particularmente en la V Conferencia de los obispo de América Latina y el Caribe en Aparecida, Brasil, en 2007.

En su exposición Rodrigo Guerra puntualizó que “el ser humano real es quien vive el cambio de época y es preciso que no se encuentre solo, sobre todo cuando habita los espacios dónde se generan los nuevos relatos y paradigmas, como lo son las ciudades, los medios de comunicación contemporáneos y las nuevas culturas juveniles, con su pluralidad de personas, lenguajes y tradiciones”, y destaca la posición del Papa Francisco, quien “no condena el estremecimiento cultural que vivimos todos como sociedad, sino que afirma el poder del cristianismo para rescatar el significado de lo humano al interior de este y de cualquier otro contexto”.

Desde una seria reflexión de la Iglesia, como referencia al Santo Padre, indica que “el cristianismo no pretende ser una mera ética o un cierto programa de autoayuda”, sino que “la certeza fundamental de tipo cristiano radica en el modo de cómo Dios mismo se involucra con todo camino humano para afirmarlo y para ampliarlo”, y “más adelante insistirá que si bien existen dificultades sumamente grandes al extenderse de manera global una cultura basada en la superficialidad, lo inmediato, lo visible, lo rápido, y lo provisorio, es importante tomar en cuenta el sustrato cristiano que aún existe en muchas sociedades, particularmente el sustrato que habita aún en los sectores más desprotegidos y abandonados”.

Les invito a leer el artículo completo y descargarlo en pdf en el siguiente link: http://www.americalatina.va/content/americalatina/es/articulos/cristianismo-y-cambio-de-epoca.html