Domingo de la Santísima Trinidad
Homilía Mons. Juan Manuel Mancilla Sánchez, Obispo De Texcoco
11 Junio 2017
Señor, Señor, Dios compasivo y clemente, ¡grande en misericordia! fiel, paciente. Queridos hermanos he querido citar el texto del libro del Éxodo porque es de los textos claves de la historia de la salvación, Dios abre su corazón, Dios reveló, nos hizo saber y este es el texto más inmediato, el texto, quisiéramos directo al momento en que Nuestro Señor nos comunicó cómo es, qué siente, qué vive, qué planea, cómo arregla las cosas Dios.
Yo no sé porqué se nos olvidó, yo no sé porqué le fuimos poniendo muchos pegostes, colguijes, perejiles, a algo tan sencillo que Él dijo de sí mismo: “Yo soy un Dios” Rajum, regem significa vientre, vientre materno, de ahí viene rajamin regem, también significa espacio. Dios tiene, es, maneja espacios infinitos, los científicos hoy como nos lo repiten, no han conocido todas las galaxias, todos los sistemas galácticos o solares, siempre porque Dios está creando constantemente espacios infinitos, llenos de luz, orden, el desorden está acá entre nosotros, pero todo lo que depende directamente de Dios está en su lugar.
Muchas personas quisieran meternos miedos, rarezas, con la guerra de las estrellas “star wars”, quisieran meternos, no sé, en medio de un mundo desquiciado, pero, la obra de Dios es majestuosa, ordenada, no hay sorpresas, Él es eterno, Él tiene bajo control el espacio infinito, que nos dé gusto hermanos. “Adonai el rajum”, Dios no es chiquito, Dios no es mezquino, nunca se le cierra la mano, espacio; abre, ofrece, produce espacios; al nivel que quieras: sideral, cósmico, también para las personas, también para el existir de los más pequeñitos.
Quiero disfrutar con ustedes el rajum bejanum, de ahí viene Juan, San Juan, janum, con mucha compasión se agacha. Agacharse, hay personas que no queremos agacharnos, es uno de los principios liberadores o no sé, y las mamás nos enseñan a agacharnos. Una mamá para todo lo que hace tiene que agacharse; todo, barrer, trapear, hacer la comida, levantar al niño, enseñarlo a caminar, vestirlo, darle de comer. Si no se agacha, hay muerte, traumas. Nuestro Señor en su infinita majestad sabe agacharse para amar, para servir, hanum.
Enseguida dice el texto, ere japaim -nada de que mecha corta- Dios no tiene la mecha corta. Dios no se prende a la primera. A Dios no te lo enganchas a la primera, y ya lo enojaste y ya está furioso, y ya está viendo a qué horas te pone en orden, a ver a qué horas te da el escopetazo.
Macroximía, le dicen los griegos, Alma grande, no sé cómo decirlo, despacito, le piensa, espera, sabe, mira muy lejos, ere japaim, no se enoja, muy lento para enojarse, rab hesed harbe, multiplica, le gusta multiplicar mucho la ternura, la dulzura, la piedad, la compasión, de hecho esta es la palabra que se usa para rabinos, ha rab, el maestro tranquilo, el maestro paciente, el maestro muy seguro, seguro de sí mismo, rab, ha rab, ¡rabí!, ¡maestro!, será de las últimas y bellísimas expresiones para Cristo. Multiplicaste el amor y la sabiduría, “émet” fiel no se va, no, ahí está, ahí está Jesús “Yo estaré con ustedes”.
Bueno hermanos, de esas características yo creo que debemos de pasar a las que menciona el apóstol San Pablo, Segunda carta a los Corintios, en su capítulo 13. Hermanos pónganse las pilas, aseméjense a Dios, sean como Dios, estudien como es Dios, recojan de Dios su modo de ser, su estilo. Y empieza “alégrate María” fue lo primero que se le dijo a la Madre de Jesús, por eso ustedes nunca se anden creyendo de revelaciones, apariciones, que la Virgen vino a regañar, que vino a llorar, que vino a amenazar, la Santísima Virgen es de Dios, es grande, la Santísima Virgen viene a dar alegría.
Para mí la única aparición autentica de la Santísima Virgen es la de Guadalupe, Nuestra Señora de Guadalupe, la de Lourdes “Yo soy la Inmaculada Concepción”, también, “yo soy intachable a imagen de Dios”; pero todas esas apariciones, tres días de obscuridad, recen, asústense, pónganse esto, claro que nosotros hemos de convertirnos, eso lo dice el Evangelio, Jesús nos pide prudencia, nos pide humildad, reconocer lo que está mal, pero no en esa forma enfermiza, nerviosa en que se pone muchas veces a la Santísima Virgen ¿Qué te preocupa hijito mío? El mas pequeño de mis hijos. Aquí estoy yo, no te preocupes te traigo en mi pecho, te traigo en mi regazo, te sigo amamantando, te sigo apapachando.
¡Alégrense!, dice clarito el apóstol San Pablo. Hermanos, siempre alegres, me encanta este término ¡mejoren!, no se queden ahí atorados, sin progresar, mediocres, adelante, sueñen, esfuércense, supérense, mejoren, más calidad, tú puedes crecer, tú cada día puedes hacer mejor las cosas, tú siempre tienes más recursos, oportunidades, aprovéchenlas, no se estanquen. A ver hermanos, ustedes y yo, hoy tomemos esa palabra, que esta semana que empieza no nos encuentren igual de atorados, ¡no! mejores, más felices, más serviciales, más atentos, más cuidadosos, más para adelante, supérense dice el apóstol San Pablo hasta que alcancen la perfección; también decía: la estatura de Cristo.
Anímense mutuamente, el texto griego dice, sean el paráclito, háganle como el Espíritu Santo consolador ¿Por qué Espíritu Santo consolador? Porque a Dios no le gusta ver tristes, acomplejados a sus hijos, los quiere alegres, entonces ustedes tomen la función del Espíritu, bueno ya vimos, imagen de Dios Padre, parecidos a Cristo, semejantes al Espíritu Santo consolador.
Pues queridos hermanos es importante escuchar la palabra, es importante poner mucho cuidado en la enseñanza divina, es nuestra vida de calidad, es nuestro bien, es lo que nos da oxígeno, es lo que nos hace caminar en este mundo difícil. El mundo siempre creara su propia palabra, su propio discurso, sus propios métodos, sus propios caprichos, y al final pues sus propios enredos y eso es muerte, eso es fracaso. Solo la palabra de Dios nos eleva, solo la palabra de Dios nos levanta a ser imagen de Dios, ser como Dios, aprenderle a Dios, imitar a su hijo Jesucristo; ver con mucha atención ¿qué es, que dijo, como lo hizo, cómo resolvió, como enfrento? Todo eso que sea en verdad la luz intima de cada uno de nosotros. Así sea.